Wuthering Heights

por Xirena Dom Ene 03, 2010 1:44 pm

Voy a darte los tres consejos que a mi no me dieron.

Este es el primero:

Olvida todo lo que te han contado: los vampiros no existen, los lobos son solo animales y los magos, las hadas y los duendes se encuentran encerrados en grandes tomos de hojas desgastadas. Quiero mostrarte la otra cara del mundo. Un lugar donde el peligro se enmarca en perfectos rostros de porcelana, el amor es como una bestia salvaje sedienta de sangre que acecha y te arranca el corazón mientras estás dormido, y la felicidad... la felicidad es un delito que se paga muy caro.

Estamos muertos, pero no somos ni vampiros, ni hombres lobo, ni fantasmas, ni pitufos, ni un producto de tu imaginación, no vimos ninguna brillante luz blanca ni tampoco el final de un túnel... simplemente seguimos siendo nosotros. Convivimos entre los vivos, nos miran y ven un reflejo de lo que son ellos, pero no nos parecemos en nada, apenas podemos sentir, ni saborear, nuestro corazón no late dentro del pecho, y nuestra alma ha perdido su esencia. A primera vista, contemplándonos, puede pareceros atractiva y apetecible esta clase de muerte, pero escuchad bien, contened las ganas de morir, porque son pocos los que pasan por este interludio. No es lo normal, no es natural, algo nos retiene en el mundo de los vivos sin pertenecer a él, y solo hay una cosa que deseamos casi todos: poder morir, de verdad.